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Desde su adolescencia, mis padres se han dedicado por
completo al cuidado de sus hijos y a las múltiples tareas, que ésta importante
función ha acarreado en sus vidas: trabajo, tareas, visitas al médico, etc...
Dejando su relación de pareja y su espacio conyugal de lado. Al llegar a sus 50
años, ambos deciden llevar a cabo el mayor de sus sueños: "casarse" y
lo logran llenos de alegría, pero dejan como pendiente su luna de miel, hasta
que el tiempo y su ajustado presupuesto se los permita. En el 2018, Dany su
hija, los lleva por un día al hotel marqués, como regalo de su primer
aniversario como casados, en donde rodeados de un ambiente familiar, cómodo,
muy apacible y reconfortante, por un día el sueño de su vida "su primer
viaje a la playa y una corta luna de miel" que les permite renovar sus
votos de amor, y disfrutar de los maravillosos espacios de este lugar: el
buffet, las piscinas, el grandiosos comedor y un talento humano que los hizo
sentirse especiales y únicos. Pero se quedan con la sensación de haber vivido
este maravilloso sueño de forma incompleta, ya que el sueño duró apenas un día.
Desde entonces, su meta ha sido volver a aquel grandioso lugar, y poder cumplir
su sueño de forma total, completa y en ese hotel "el marqués" que les
permitió convertir su mayor anhelo en realidad. Cada noche, ante las estrellas,
recuerdan los gratos momentos que compartieron juntos en la playa, y sueñan en
cómo será la próxima ocasión que visiten ese maravilloso lugar.
Autora: Daniela Montalvo
